La compresión es la presión creada en los cilindros una vez que el pistón alcanza el punto muerto superior, luego de cada ciclo. Ésta se genera a medida que el pistón se mueve desde el punto inferior al punto superior, comprimiendo aire o la mezcla de aire-combustible.
Por lo tanto, si deseas realizar la compra de un vehículo usado, esta es una prueba sumamente efectiva para lograr establecer la vida útil del motor.
¿Cómo se mide la compresión?
Primeramente, se debe conocer que para medir la compresión se requiere de instrumento denominado medidor de compresión. Este es un dispositivo que cuenta con un manómetro conectado por un tubo al cilindro y equipado con una válvula de retención para no disminuir la presión medida.
Para medir la compresión, solo se requiere que esté presente la presión de aire en el cilindro. Por lo tanto, no es necesario que esté encendido el vehículo o que esté presente el suministro de combustible.
Únicamente necesitas desenroscar la bujía y atornillar la manguera del compresor en su lugar. Para que se muestre la medida, se debe dar arranque al coche sin encenderlo (esto es solo para que los pistones realicen su ciclo).
¿Por qué medir la compresión?
La medición de la compresión te permite evaluar las capacidades técnicas del motor, y luego poder realizar una comparación con los parámetros de fábrica, con la finalidad de determinar la diferencia que hay entre ellos.
Una tasa de compresión baja significa que hay problemas con el motor, porque el aire se escapa de la cámara de combustión, y cuando el motor está funcionando, los gases calientes saldrán de él.
Puede haber varias razones que provocan la pérdida de compresión, como los aros de pistón defectuosos, daños en los asientos de las válvulas y en las propias válvulas, fugas en la junta de la culata e incluso una grieta en el pistón.
Por último, no solo es importante la cantidad de compresión en sí, sino también su uniformidad en todos los cilindros del motor. Si la compresión en uno o más cilindros es menor que en otros, esto indica un desgaste desigual y la presencia evidencia un problema.
Por lo tanto, medir la compresión es uno de los métodos simples pero efectivos para evaluar la salud y el estado técnico general de un motor. Por lo tanto, la medición de la compresión puede y debe realizarse antes de comprar cualquier coche.
