Las máquinas tragaperras se mudan al escenario de Internet

Las máquinas tragaperras se mudan al escenario de Internet

Las llamadas máquinas tragaperras, o tragamonedas, son algo que nunca falta al imaginarnos un casino.

De hecho, se han multiplicado los portales con tragaperras clasicas de bar online. Su sistema de juego y premios es muy similar al de las máquinas reales. En dado caso, se requiere poseer conectividad a Internet y un dispositivo de conexión. Este último puede ser un computador de escritorio, un Smartphone o una Tablet.

Puede decirse que la versión web de estas máquinas es una evolución de estos sistemas de juego. Sucede que la primera máquina de apuestas tragaperras se inventa en 1887.  Su creador fue Charles Fey (1862-1944), quien diseña un sistema con tres ruedas giratorias y cinco símbolos. Vale decirse que ideó su máquina con unos símbolos similares a los del poker, aunque añadiendo un par de variantes: «Diamantes», «Corazones», «Espadas», «Herraduras» y «Campanas». 

La idea es que el trío de ruedas girase al azar, siendo impulsadas por una palanca accionada por el jugador. Tales ruedas contaban con engranajes que las detenían al cabo de unos segundos. Si las tres ruedas se frenaban justo en el mismo símbolo (cualquiera de los cinco usados), entonces se emitía un premio automático. Las ventajas de estos dispositivos eran las siguientes:

  • El usuario podía jugar solo. Era una alternativa muy buscada, ya que en las mesas de póker solo se sentaban jugadores experimentados en las barajas.

  • Muchas personas solitarias iban a los casinos. Se trataba de un grupo de clientes potenciales.

  • El juego era simple: no había que aprender las complicadas reglas del poker, blackjack y otros envites similares.

  • Se emitía un premio inmediato: si las tres figuras que mostraban las ruedas coincidían, la máquina liberaba de una vez un premio en metálico.

¿Y por qué estos aparatos se bautizaron como “tragamonedas” o “tragaperras”? La razón es que, para funcionar, requerían que el jugador introdujese una moneda a través de un orificio. Esa moneda era la “apuesta”. En España, la gente las empezó a llamar tragaperras y con ese nombre se conocen en el ámbito hispánico y otros lugares.

En la actualidad, los mejores casinos para jugar online siempre cuentan con simuladores de estas máquinas. En dado caso, las máquinas originales eran como un delicado mecanismo de relojería: con engranajes, sistema de recolección, emisión de las monedas, etc. Además, con el tiempo se añadieron cuestiones lúdicas, como sonidos y luces coloridas.

Al transcurrir las décadas, las máquinas tragaperras acogieron las novedades de la tecnología. Dejaron de contener las ruedas giratorias. En su lugar, aparecieron pantallas táctiles donde los jugadores pulsaban el mecanismo que conjuraba la suerte y el azar. Dentro de estas máquinas, las piezas mecánicas fueron suplidas por circuitos electrónicos. Los cambios llegaron, pero la juerga y el protocolo eran iguales: apostar una moneda y cruzar los dedos para que tres figuras coincidieran.

Por lo antes dicho, la mudanza de estas máquinas hacia el universo online ha sido más natural de lo esperado. La gente ya se había acostumbrado a ver estas máquinas con una pantalla y, luego, esa pantalla se traspasaría a una computadora, un celular o Tablet. 

¿Cómo funcionan ahora las tragaperras online? 

Sucede que sus primigenios artilugios mecánicos son relevados por algoritmos de computación. Para ello, se usan un par de nociones de software: el RNG (Random Number Generation) y el RTP (Real-time Transport Protocol). El primero se encarga de generar los números binarios que se representan a las cinco figuras de este juego de azar. Por su parte, el RTP maneja las estadísticas del juego en tiempo real. 

El resultado es que en el siglo XXI parece haber un auge de las máquinas tragaperras. El detalle es que ahora los apostadores no visitan los míticos casinos, sino que se conectan a la web. Puede decirse que estas máquinas tragaperras han tenido una suerte similar a los cines o los libros. Por ejemplo, las viejas salas de cine se eclipsan ante las plataformas de streaming (tal es el caso del popular Netflix, Amazon Prime, etc.). A su vez, los edificios de bibliotecas tienen como contraparte los reservorios de libros digitales, los ebooks, PDF, etcétera.

¿Por qué decimos que existe un auge de las máquinas tragaperras en la web? 

Sucede que muchas estadísticas así lo patentizan. Los casinos online siempre ofrecen la opción de jugar con estos simuladores de tragaperras. Y la mayoría de los usuarios prefieren entretenerse y apostar con las tragaperras online. Se trata del juego de casino virtual más popular, el que más ingresos otorga a estas casas de apuestas digitales. 

Quizás, el éxito de las tragaperras online deriva de una dosis de nostalgia: a través de Internet se rememoran esas tragaperras que siempre estuvieron en el paisaje de los casinos. Si bien estamos en la era de la informática y de la conectividad, sucede que sobrevuela una pincelada de memoria. Muchas personas se adentran en el mundo contemporáneo de la web, pero en realidad llevan tatuada en su corazón la vieja escuela de los casinos clásicos.


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