Es un proceso de adaptación necesario por el que algunas personas pasan cuando vuelven de las vacaciones.

El síndrome post vacacional no está aceptado internacionalmente como una enfermedad, aunque cada vez cobra mayor importancia debido al aumento de casos que suceden en los últimos años.

Las personas que padecen este síndrome sufren cambios que dan lugar a un malestar importante con una repercusión importante sobre su calidad de vida.

Es un proceso de adaptación necesario cuando se entra de nuevo en contacto con la vida activa.