Charles Lutwidge Dodgson (1832-1898), más conocido como Lewis Carroll, escribió una de las obras más conocidas de la literatura: 'Alicia en el país de las maravillas'.

Aunque es considerado un libro infantil, la realidad es que es uno de los textos más crípticos y misteriosos de la historia de la literatura, con una infinidad de explicaciones.

Dodgson, un diácono anglicano, lógico, matemático y fotógrafo, además de escritor pudo haber sido en realidad 'Jack el Destripador'.

Y es que en 1996, el autor Richard Wallace no vaciló al acusarlo de ser el hombre que estaba oculto bajo ese alias.

Las pruebas que mostró eran frases crípticas contenidas en sus libros diecinueve años antes de la matanza del otoño de 1888.

Según Wallace, Carroll dejó siempre pistas anticipando los crímenes que planeaba cometer. Wallace sustenta su hipótesis, también, en el carácter reprimido y la infancia traumática de Dodgson.

La realidad es que la identidad de Jack el Destripador, un asesino que acabó con la vida de varias prostitutas con un 'modus operandi' muy específico (estrangulación, degollamiento y mutilación abdominal), nunca fue descubierto.