El Real Madrid fichó por vez primera a un jovencísimo Mariano Díaz en 2011. "Le seguíamos desde pequeño, como a tantos otros. Del Premiá pasó al Espanyol, pero como tardó en desarrollarse físicamente, le descartaron y regresó al Premiá", explica Manolo Romero, el hombre que descubrió a Mariano y que duramente 20 años trabajó como ojeador del Real Madrid en Cataluña.

Mariano trabajó su cuerpo en el gimnasio de su padre, que fue culturista, en Premiá, y tras pegar el estirón fichó por el Badalona. "Entonces conseguimos su fichaje", apunta Romero, que a día de hoy mantiene una relación muy cercana con Mariano.

Por aquel entonces Mariano rondaba la mayoría de edad, y se unió al Juvenil A del Real Madrid. El conjunto blanco desembolsó 40.000 euros por Mariano y por Sergio Cortés, otra joven promesa que no hizo carrera y que actualmente milita en el Ebro.

Mariano pertenece a una familia humilde, y seguramente esa humildad es la que le ha permitido llegar a profesional y triunfar en el fútbol. A día de hoy, mantiene intacta su humildad y sabe muy bien de donde viene.

"Es muy agradecido, conserva una visión humilde de la vida a pesar de cómo le está yendo. No se olvida de quiénes le han ayudado. Una anécdota que le honra y define: Sin yo pedirle nada, me llamó para decirme que me daba una entrada para la final de Cardiff. Venía en el AVE a Barcelona y me estuvo esperando en la estación a que llegara para recogerla". 

A Continuación, hemos seleccionado los artículos más destacados de nuestra categoría DEPORTE: