Los tornados ciclónicos de fuego devastaron el sur de Australia hace unos meses.

Olas de fuego que asediaron y destruyeron el país australiano.

Una de las manifestaciones más terroríficas de los incendios en Australia son los tornados de fuego. 

Los tornados de fuego se forman cuando se combina el calor extremo en el suelo producido por los incendios con una capa de aire fría que sopla encima del incendio. 

A medida que va ganando velocidad, el tornado empieza a arrasar brasas y toto tipo de material inflamable, creando una especie de torre de fuego que destruye todo a su paso. 

Las temperaturas en el interior del tornado de fuego alcanzan los 1.500 grados y pueden llegar a producir vientos de más de 250 km por hora. Generalmente, suelen durar unos minutos, pero es tiempo más que suficiente para provocar terribles daños. 

Desde septiembre del año pasado, han muerto más de 20 personas en incendios descontrolados y miles de casas han sido incendiadas. En torno a 500 millones de animales se han hacinado en los incendios forestales en Australia. Los koalas, en peligro de extinción. 

Los fuegos que arrasaron en Australia consumen los bosques del país y forman también parte del ciclo de regeneración de la naturaleza. Por otra parte, el cambio climático ha provocado que los veranos cada vez sean más largos, con temperaturas más altas y con un calor muy extremo.