El frío del invierno hace que necesitemos contar con un sistema de calefacción que cubra nuestras necesidades, lo que sin duda incrementa nuestros gastos.
Por ello te brindamos una serie de trucos que te ayudarán a ahorrar en la factura de electricidad al mismo tiempo que contribuyes con un consumo más consciente y eficiente a reducir el impacto en el medio ambiente.
1. Usa doble vidrio
Para tus ventanas es importante que instales sistemas de vidrio reforzado que ayuden a contener el calor en el interior. Esto se debe a que a través de las ventanas se suele escapar el calor, lo que hace que el espacio se enfríe rápidamente. Con un sistema de doble cristal se puede disminuir la posibilidad de pérdida de calor hasta un 50%.
2. Emplea selladores de juntas
Verifica cada espacio de tu hogar por el cual se pueda estar escapando el calor del interior. Aplica sellador de silicona en los bordes de los marcos de manera que puedas sellar lo mejor posible el espacio.
3. Mantén una temperatura constante
Recuerda que por cada grado de temperatura que se aumente se estima que el consumo eléctrico se eleva en un 7%, por ello debes establecer una temperatura adecuada. Se recomienda mantener una temperatura de entre 19 y 21°C durante el día y de entre 15 a 17°C por las noches.
4. Aprovecha el calor natural
Durante las horas del día mantén las persianas y cortinas abiertas. Esto ayudará a captar mejor el calor, y en las horas nocturnas, mantenlas bien cerradas. En caso de necesitar ventilar puedes abrir las ventanas durante 10 minutos, lo cual será suficiente.
5. Instala un termostato programable
Esto te ayudará especialmente si te mantienes fuera de tu hogar durante varias horas al día. Puedes programarlo para que se encienda 1 hora antes de tu llegada habitual, de modo que ahorrarás muchas horas de consumo innecesario.
6. Calienta solo las habitaciones que usarás
No es necesario activar la calefacción para zonas de tu hogar que no usas o usas poco tiempo. Puedes seleccionar las áreas en las que realmente permanecerás y así podrás ahorrar una buena cantidad de energía.
7. Usa ropa de abrigo
Si regulas una temperatura constante en tu hogar, puedes mantenerte usando ropa de abrigo para evitar tener que subir la temperatura. Incluso en inviernos no tan fuertes, puedes mantener la calefacción apagada durante las noches y usar una buena cantidad de prendas de abrigo.
8. Mejora tu sistema de calefacción
Si cuentas con un sistema antiguo, revisa algunas ofertas disponibles en el mercado y podrías conseguir métodos más eficientes con una clasificación energética elevada. Esto te ayudará a obtener un mejor rendimiento con un menor consumo.
