Se trata de Venus.
La temperatura media en su superficie es de 464 ºC, y nunca baja de 400 ºC. Mercurio se encuentra a la mitad de distancia del Sol, pero su temperatura es de solamente unos 160 ºC. La diferencia se debe a que la atmósfera de
Venus está compuesta al 96,5% por dióxido de carbono, gas responsable del efecto invernadero.