Pregunta formulada por: Ernesto Rodríguez Valle (Gijón)

Los más de 120 kilogramos que pesan los trajes que llevan los astronautas al espacio no son a la ligera. 

Y es que esta vestimenta tan particular es básica para que los seres humanos logren sobrevivir en un entorno tan hostil como éste. Si un astronauta tuviera un percance en su traje durante un paseo espacial sufriría una despresurización.

Sus consecuencias no serían inmediatas, pero a los pocos segundos empezaría a notar cambios en su cuerpo: el mismo se empezaría hinchar a medida que el agua de los tejidos se fuera evaporando (pero sin llegar explotar); la sangre empezaría a llenarse de burbujas y las venas se colapsarían, los pulmones empezarían a perder aire y no podría respirar, el cuerpo se empezaría a congerlar, la piel presentaría quemaduras a los pocos minutos y, por su puesto, la consciencia se perdería a los 15 segundos y poco después se produciría la muerte.

Todo ello se sabe gracias a los experimentos realizados con animales, si bien en 1965 un técnico sufrió por error una despresurización en una cámara de vacío del Johnson Space Center de Houston, Tras recuperar la consciencia este hombre comentó que había tenido la sensación de que los fluidos de su lengua "empezaban a hervir".