Las bolas chinas son un juguete sexual destinado a las mujeres.

Consisten en dos bolas bastante ligeras que se introducen en la vagina tras el músculo pubocoxígeo.

Su mecanismo incluye otras bolas más pequeñas en el interior de las dos mayores, creando un pequeño vacío.

Así, el movimiento de estas bolas menores hace que golpeen las exteriores, por lo que se genera un efecto vibratorio que estimula sexualmente los genitales femeninos.

De hecho, actividades cotidianas como caminar pueden amplificar los efectos de este instrumento.

Entre sus cualidades terapéuticas están la prevención de la incontinencia urinaria o el vaginismo, además de mejorar la satisfacción sexual de su portadora.

Y si se usan junto a un gel específico también pueden ayudar a fortalecer la musculatura pelvica.

De todas formas, la edad de la mujer, el tamaño de su vagina y si ha tenido hijos o no son factores a tener en cuenta a la hora de elegir las mejores bolas chinas para usar.

Se recomienda iniciarse en su uso con sesiones de 15 a 20 minutos tres días a la semana, para posteriormente aumentarlo a cuatro días a la semana hasta poder llevarlas todos los días.

Todo ello siempre después de haber lubricado la zona para evitar cualquier tipo de lesión.